Acerca de Alexandre Tehfi
Fecha de nacimiento: Noviembre 26, 1998
Dueño: Tiwona- Taller de Cerámica Barcelona
Mi Historia
Desde que era niño, siempre tuve un espíritu inquieto y una profunda conexión con los animales, aunque no siempre supe que los caballos y la cerámica se convertirían en mis grandes pasiones. Este es el recorrido de mi vida, lleno de desafíos, aprendizajes y determinación, que me ha llevado a perseguir mi sueño en la equitación y el arte.
2014: Un Nuevo Comienzo en Arizona
En 2014, mis padres tomaron una decisión que cambiaría mi vida: enviarme a un internado en medio de Arizona. Al principio, lo odiaba. No quería estar ahí, lejos de casa y rodeado de extraños. Pero, poco a poco, descubrí dos actividades que despertaron algo en mí: la cerámica y la equitación.
En esos primeros seis meses, empecé a tornear arcilla y a montar a caballo. Lo que al principio era una simple distracción se convirtió en una verdadera pasión. Fue ahí cuando empecé a soñar con dedicarme a algo grande, aunque todavía no sabía qué.
El Encuentro con Belle y Zeke

Durante mis primeras experiencias con los caballos, me aterraba la idea de acercarme demasiado a ellos. Recuerdo especialmente un caballo que nadie podía montar porque siempre botaba a su jinete. Me daba miedo incluso darle una manzana.
Pero poco a poco fui superando mis miedos, y me asignaron a Belle, una Mustang Española que se convirtió en mi primera maestra. Con ella aprendí las bases de la equitación y fui ganando confianza. Después, llegó Zeke, el primer caballo del que realmente me enamoré. Con él descubrí el trabajo pie a tierra y el entrenamiento.
2018: Enamorándome del Deporte
Cuando tuve que despedirme de Zeke a principios de 2018, ya estaba completamente enamorado de la equitación. Fue entonces cuando decidí compartir con mis padres mi deseo de convertirme en profesional. Pero su respuesta fue un rotundo “no”. No creían que pudiera vivir de esto y me dejaron claro que no recibiría apoyo financiero.
Ante esto, tuve que buscar una manera de sostenerme. Viajé por el mundo durante un año, trabajando en distintos lugares y viviendo experiencias inolvidables, como cruzar fronteras a caballo en Sudáfrica. Sin embargo, aunque aprendí mucho, no lograba acceder al entrenamiento que realmente deseaba.

2020: El Rescate de Zorro
De regreso en México, trabajé como agente de ventas inmobiliarias, la única idea que mis padres apoyaban. Fue en ese tiempo cuando encontré a Zorro, un ex-caballo de carreras abandonado en una cuadra, con herraduras sin cambiar y graves infecciones.
Decidí rescatarlo, cuidarlo y rehabilitarlo. Juntos vivimos grandes aventuras, como cabalgatas con 15,000 caballos durante días. Fue con él que tomé mis primeras clases de doma clásica, aunque solo pude permitirme unas pocas.

2021-2023: El Camino a España y la Cerámica
En busca de una oportunidad, decidí ir a la universidad en España, supuestamente para estudiar psicología, pero en realidad, porque sabía que había caballos. Sin embargo, estar en clase solo hacía que mi mente estuviera en otro lugar: en la equitación.
Para acercarme a mi sueño, abrí un pequeño taller de cerámica en un local diminuto y en una zona poco favorable. Con esfuerzo, empecé a generar algo de dinero y lo invertí en más clases de doma clásica. Sin embargo, al ser principiante, nadie me aceptaba como aprendiz; solo conseguía trabajos de mozo.
2023: Mi Negocio y Mi Gran Oportunidad
Con mis ahorros y la ayuda de mi padre, decidí abrir mi propio negocio de cerámica. Fue una apuesta arriesgada, pero no tenía otra opción si quería financiar mi entrenamiento ecuestre. Desde entonces, he trabajado incansablemente, todos los días del año, incluyendo festivos, para que este sueño crezca. Vendi parte de mi compañia para poder tener mas tiempo, mi equipo cree en mi sueño y se han convertido en mi sponsor principal.
Gracias a mi esfuerzo, desde Octubre de 2023 he podido montar a diario en el Club Hípico de Collserola con mi entrenadora Carlota, quien ha sido clave en mi avance.

2024: El Futuro con Mi Potro
En Agosto del 2024, di un paso más y compré un potro, al que hemos iniciado desde cero junto con mi entrenadora. Su doma ha sido un proceso paciente y cuidadoso, asegurándonos de no exigirle más de lo que su cuerpo en crecimiento podía soportar.
Ahora que ha cumplido tres años, estamos listos para avanzar en su entrenamiento. Y aunque sigo siendo un principiante, cada día me acerco más a mi meta.


El Sueño Continúa
Mi primera competición fue hace nueve meses, logrando un segundo lugar en mi debut. Desde entonces, he competido algunas veces más, pero aún me enfrento a la dificultad económica de costear más eventos.
Por eso, sigo trabajando día y noche en mi negocio, con la esperanza de seguir creciendo, ahorrar más y poder competir con mayor frecuencia. Sé que el camino no es fácil, pero mi pasión por la equitación y la cerámica me impulsan a seguir adelante.
Conclusión
Esta es mi historia hasta ahora. Un camino lleno de retos, sacrificios y aprendizajes, pero también de enormes satisfacciones. Sigo en el proceso de construir mi sueño y avanzar en la equitación, mientras hago crecer mi negocio.
Si algo he aprendido en estos años, es que cuando una pasión es lo suficientemente fuerte, siempre encontraremos la forma de hacerla realidad.
